Inteligencia artificial: Desafíos y oportunidades

Jose S. Azcona Bocock

La inteligencia artificial (IA) aplicada a la economía ha dejado de ser un elemento teórico o marginal. Con un mercado que llegará a los $USD 200 mil millones y un crecimiento anual esperado superior al 20% por la siguiente década, continuará siendo una parte cada vez más importante de la actividad económica.

A diferencia de otras tecnologías que han requerido mucha infraestructura y personal especializado, la naturaleza simple de las interacciones permite dar saltos tecnológicos que colocan a países en niveles competitivos con las ubicaciones más avanzadas del mundo. Los motores o cerebros disponibles son exactamente los mismos y requieren poca formación especializada para acceder a ellos.

En la empresa en la que participo ya hemos comenzado este proceso. Automatizando mediante bots elementos secuenciales de los procesos de adquisiciones, contables, de desarrollo de producto, y otros, hemos logrado aumentos tangibles en la productividad. Excluyendo personal de campo, se puede esperar que la aplicación de la inteligencia artificial resulte en un incremento de productividad de entre un 15% y un 25% en un plazo de 1 año. Esto se logra invirtiendo en capacitaciones y acceso a sistemas para todo el personal, además de descentralizar el liderazgo y la iniciativa a todos los niveles.

Según el informe ILIA 2024 (del Instituto Latinoamericano de Inteligencia Artificial), Honduras enfrenta importantes atrasos de competitividad inicial en el sector. Esto se manifiesta principalmente en la infraestructura física, regulación y capacidades de investigación y desarrollo. Sin embargo, el país presenta una mejor situación en las capacidades básicas de la fuerza laboral en IA y el conocimiento del inglés. Este informe puede servirnos de base para identificar áreas prioritarias de mejora.

Atender esta área es fundamental para la economía del país. Actualmente, Honduras depende en gran medida de rubros económicos como el soporte externo empresarial (BPO, call centers, etc.), donde ya se observan reemplazos mediante bots programados para actuar como interlocutores humanos. Si aprovechamos el conocimiento y las capacidades crecientes en el país, y lo unimos al desarrollo de nuestras capacidades en inteligencia artificial, no solo podemos preservar empleos, sino también continuar desarrollando productividad con mayor valor agregado.

Por ello, es esencial que las instituciones académicas, las empresas y el sector público promuevan e integren el desarrollo de las capacidades en IA en el país. El sector público y las empresas de telecomunicaciones deben invertir en aumentar las capacidades de las redes de telecomunicaciones, para habilitar la construcción de centros de datos. Además, se deben continuar los programas de inclusión digital y educación tecnológica.

Esto permitirá mantener la competitividad en un nivel pasivo. Sin embargo, considerando que la IA ofrece un campo de acción más equilibrado en comparación con otros sectores, resulta crucial la implementación de una estrategia nacional de IA. Esto debe comenzar con una mayor conciencia sobre su importancia, fomentando el desarrollo de nuevas empresas de tecnología e investigación.

La IA representa una oportunidad crucial para transformar la economía de Honduras. Con un enfoque estratégico en infraestructura, educación y regulación, el país no solo puede mantener su competitividad, sino también convertirse en un líder regional en tecnología. Esto requerirá el compromiso coordinado de todos los sectores para superar los desafíos actuales y aprovechar al máximo las ventajas de la IA en el contexto local.

Este cuadro resume las áreas críticas, estrategias clave, y los indicadores esperados para medir el éxito en el fortalecimiento del ecosistema digital y tecnológico en Honduras.