Los bomberos y la alcaldia
Jose S. Azcona Bocock
Los cuerpos de bomberos surgen como las primeras instituciones de servicio social propiamente urbanas en la historia humana. Desde su inicio han tenido una identificación muy fuerte con los municipios a cuyos habitantes sirven. Ha sido un paso importante ir devolviendo estas funciones a los municipios, que siempre se han debido hacer cargo de ellas.
Hemos escuchado mucho los últimos días sobre la iliquidez del cuerpo de bomberos de la ciudad capital. Este problema tiene varios componentes: El calendario de transferencias que debe de hacer la alcaldía municipal, y la certitud con la que se le transfieren los fondos que se recaudan de las tasas municipales de bomberos.
En el proyecto de presupuesto municipal del año 2004, aprobado por la mayoría nacionalista de la Corporación Municipal, se contempla una recaudación total de L. 27,473,820 por concepto de bomberos. De esta cantidad L.11.391.584 corresponden a la parte residencial, recaudados con el impuesto de buenes inmuebles, y L.16,808.236 corresponden a la parte comercial, recaudados por volumen de ventas. Este monto total debe de ser transferido al cuerpo de bomberos durante el periodo 2004, ya que la alcaldía municipal es únicamente un agente de recaudación de esta tasa.
Estas recaudaciones se dan primariamente en los meses de enero (comercial) y agosto (residencial), por lo que no hay una regularidad en los ingresos de estos fondos. Sin embargo, las necesidades del cuerpo de bomberos son continuas a lo largo del tiempo por lo que si no se hace un calendario especifico de transferencias, el cuerpo de bomberos corre con el riesgo de quedar sin recursos tal como a ocurrido en los últimos meses.
Por tanto es necesario asegurar ambas partes: Las transferencias deben de sumar la cantidad total que se recaude por concepto de la tasa de bomberos, que cuyo monto es de mas de veintisiete millones de lempiras, pero por motivos de falta de pago de algunos inmuebles o negocios podria ser menor. Lo importante, fuese la cantidad que fuese, es que se hiciese la transferencia de forma integra.
El segundo problema, de la iliquidez temporal del cuerpo de bomberos, se debe de resolver por medio de un plan mensualizado de transferencias, según el cual se pongan de acuerdo la administración municipal y el cuerpo de bomberos sobre las necesidades mensuales del mismo, y los ciclos de ingreso. De esta manera se podría planificar mejor las inversiones puntuales, gastos de mantenimiento y operaciones y otros eventuales que tenga el cuerpo.
Que las municipalidades y los cuerpos de bomberos puedan trabajar juntos para brindar un excelente servicio a la ciudadanía es tarea de todos. Seria lamentable ver las finanzas de una institución tan importante convertirse en punto de discusión de la politiquería criolla. Por tanto es importante crear este calendario y tener cifras claras que le permitan al cuerpo de bomberos operar de forma eficiente y a la alcaldía municipal planificar sus erogaciones con la mayor claridad posible.
(2004)